
La construcción de un nuevo estadio de los San Diego Chargers en el centro podría brindar inmensas oportunidades económicas y cívicas al East Village y a toda la región de San Diego. Con esto y los mejores intereses de la región en mente, incluyendo mantener a los Chargers aquí en San Diego, debemos determinar rápidamente la viabilidad financiera de este sitio. El estudio de viabilidad financiera, que fue aprobado recientemente por Center City Development Corp. con dinero de su fondo general, es un proceso de cuatro a seis meses que ayudará a la ciudad a determinar las ramificaciones financieras de ubicar el estadio en el patio de autobuses actual para el Metropolitan Transit System, ubicado al este de Petco Park. El mayor obstáculo para el posible estadio es cómo financiar el proyecto de aproximadamente $1 mil millones, lo que subraya aún más la importancia de acelerar esta revisión financiera. Los líderes de la comunidad, incluida la Cámara de Comercio Regional de San Diego, están entusiasmados con la perspectiva de un nuevo estadio en una de nuestras áreas de remodelación más destacadas. Convertir el patio de autobuses del Sistema de Tránsito Metropolitano en un estadio de última generación sería un catalizador eficaz para impulsar la remodelación en East Village, pero debemos actuar rápidamente para garantizar esta viabilidad. Arrastrar los pies en la oportunidad de trasladar a los Chargers a East Village solo abrirá la ventana para que los municipios fuera de nuestra región se lancen al ruedo y atraigan a los Chargers a otros lugares. Tener un equipo local de la NFL puede generar cientos de millones de dólares por año para la economía local, y para que San Diego siga en la carrera, debemos acelerar este estudio de viabilidad financiera lo más rápido posible. Mientras que estas posibilidades son recibidas con entusiasmo por muchos de los líderes de la comunidad de San Diego, la incertidumbre de la ubicación propuesta está poniendo nerviosos a muchos propietarios y residentes de East Village. La perspectiva de un futuro desconocido para el área puede causar ansiedad entre los propietarios que pueden tener dificultades para alquilar un espacio, los desarrolladores que pueden necesitar suspender proyectos pendientes y los propietarios de negocios que pueden enfrentar una gran cantidad de incógnitas, todo lo cual tendría un impacto financiero negativo en la región de San Diego. Revisar el proyecto de manera oportuna dirá si los beneficios de un estadio en el centro de la ciudad superan los riesgos. Si bien un estadio de fútbol en el centro de la ciudad podría tener un impacto positivo duradero en East Village y la región de San Diego, a corto plazo debemos centrarnos en analizar las posibilidades financieras de construir en este sitio con un excepcional sentido de urgencia. La velocidad con la que llevemos a cabo este estudio puede tener un impacto significativo en las empresas y los residentes de East Village y muy bien puede determinar la capacidad de San Diego para seguir siendo un hogar viable para los Chargers. Rubén Barrales es el presidente y director ejecutivo de la Cámara de Comercio Regional de San Diego.